Fredy Armando Valencia, ‘Monstruo de Monserrate’ 1era parte

“Un olor nauseabundo”

Esta persona, quien por varios años estuvo rodeando el Bronx y lugares de tolerancia en Bogotá, era conocido como un habitante de calle más, pues compraba alucinógenos para satisfacer su adicción al consumo de dichas sustancias, realizaba hurtos simples a los transeúntes del centro de Bogotá y su alrededores, el Monstruo de Monserrate’ montó un ‘cambuche’ en los cerros orientales de Bogotá cerca del cerro de  Monserrate, allí vivía hace mucho tiempo, hasta que un día muy particular, observo que cerca de su “cambuche” donde el olor nauseabundo era bastante incomodo, se encontraba un perro oliendo su basura, de inmediato se acercó y vio a una mujer de edad junto con su hija, pues ellas simplemente buscaban una zona para crear su cambuche, acción que los habitantes de calle hacen para poder protegerse del frio y la lluvia de la ciudad de Bogotá.    

La información sobre el ‘Monstruo de Monserrate’, es escasa por su misma condición de habitante de calle, lo poco que se sabe sobre él, fue sobre su consumo de drogas, esta adicción es generada a raíz de la muerte de su madre y de una decepción sentimental que tuvo en su pasado cuando vivía en una familia de clase media ubicada en el barrio Kennedy al sur occidente de la ciudad y estudiaba en la universidad ******  allí cursó 4 semestres de Ingeniería Industrial, pues el nació en la ciudad de Bogotá en el año 1982, es decir que actualmente tiene 38 años de edad.

Sus víctimas eran mujeres habitantes de calle, pues si analizamos eran personas más fáciles de acceder debido a su condición de vida y necesidad económica, es allí donde el ‘Monstruo de Monserrate’, aprovechaba para poder ofrecerles algo de comida, bebida y drogas, aspectos muy propios de asesinos seriales y psicópatas, aparte de esto otros habitantes de calle lo conocieron como una persona muy amable, esta actitud facilitaba para proponerle de manera amable a esas mujeres ir a su cambuche ubicado en los cerros de Monserrate para solicitarles sexo y complacer su necesidad sexual, pero estas mujeres nunca pensaron que se iban a convertir en víctimas de este monstruo, después de hablar con ellas en el cambuche y ofrecer un poco de cortesía las hacia ingresar a su lugar de residencia para  luego asfixiarlas mecánicamente de una manera que posiblemente no sentiría remordimiento por hacerlo, simplemente lo hacía…

Según sus propios relatos, indica que cometió en varias oportunidades actos de necrofilia (tener relaciones sexuales con cadáveres), debido a que cuando le daban ganas de complacer su deseo sexual las buscaba donde fueron sepultadas, las limpiaba de manera rápida y las accedía nuevamente, satisfaciendo de manera fría su deseo de tener sexo, además confesó que enterraba los cadáveres de forma estratégica para que la policía o ende investigativo y la ciudadanía no se enteraran de las desapariciones de las mujeres.

La policía lo relacionaron con la muerte de 9 mujeres según fuentes web, pues el número exacto se desconoce debido que la información en algunos sitios web indican 9, 17 o 18 homicidios, pero su confesión, aseguró que mató un promedio de 100 mujeres, incluidas menores de edad, fue condenado en el 2016

Actualmente se le considera uno de los asesinos seriales más prolíficos de Bogotá de los últimos años, tiene una condena de 36 años de cárcel, la cual la cumple en la penitenciaría La Picota, al sur de Bogotá, aunque su caso sigue en revisión y es probable que le caigan más años de condena.

CONTINUARA….    

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Escrito redactado por cristian sierra